Ayer fue lunes otra vez, lunes en el paro otra vez. El nivel de dopamina, por los suelos. Cada rutinaria y necesaria acción requirió de toda mi energía. Subir tres pisos andando, toda una gesta. Salí de casa para comprar pelos de sierra, cola de carpintero, y nada de comida. Vino un mensajero con un diploma. Tenía un pendiente y me llamó Verónica, nada de Verónica Cernadas, ni de señora Cernadas. Casi le doy propina. Escucho
Beneath the rose concentrándome mucho, cada vez puede ser la última (
gracias, spotify). Tomo café en porcelana china de flores. Me pruebo ropa que tiene ya 30 años.
Estornudo.
Me aprendo el nombre de las flores.
A dream of her - Micah P. Hinson
4 comentarios:
esta música me recuerda a los waterboys, en algunos momentos. ¿no le diste la propina? pues ahorra, eso vengo haciendo yo desde hace más de doce años, para los veranos sobre todo, y no para ir de vacaciones, sino para comer, es curioso, en verano siempre andamos necesitados, si no fuera por el ahorro.
Lo siento por el paro, aprovéchalo, de todos modos.
Ánimos y a perseguir lo que buscas.
Y sigue con la poesía :)
gracias, chicos
puede que te refieras al canon de pachelbel o al adagio de albinoni (que en realidad, si mal no recuerdo, no era de albinoni), pero la verdad es queno estou seguro, hay un algo por ahí
Publicar un comentario