viernes, 25 de junio de 2010

ya sé que esto en psicología tiene nombre

Con quince años
gané un premio de poesía

me dieron 15000 pesetas
por un poema de amor

y un diploma

que me entregó una funcionaria
sin ninguna ceremonia
( había llegado varios días tarde
porque estaba en un campamento enamorándome)

Recuerdo que fui con mi madre a recogerlo
a un pueblo de Lugo
que me pareció lejísimos

Mi padre había muerto tres meses antes

En el pueblo
nos hicimos fotos tristes
en las que salimos sonriendo

Delante de una torre medieval
aparezco con unas bermudas verdes horribles
que entonces me encantaban

mi madre va de negro
(el alivio vendrá más tarde)

En aquel verano tan largo
pensábamos en papá todos los días
sólo pensar porque hablar era imposible

y durante años
mi padre se borró de nuestro vocabulario
(en mi familia esquivamos el dolor como gatitos)

no aparecía tampoco en los poemas
porque yo sólo escribía sobre príncipes azules
y un padre muerto...
bueno,
digamos que tiene otro color

pero hoy...

hoy he pensado en ti
hoy quise decirle papá a alguien
y aunque este poema sea el más ñoño
que se haya escrito nunca
este gatito quería decir
que se ha cansado de no tener papá
y que va a inventarse uno
que viva en internet
y lea todo lo que escribe
y le diga que muy bien así se hace
qué premio más merecido

4 comentarios:

Anónimo dijo...

Los padres suelen ser rudos, poco expresivos, de emociones contenidas, exabrupto fácil. Peleones, fanfarrones, autoritarios, aguerridos, trabajadores y luchadores.
Por todo eso y por mucho más, tan poco dados a frases del tipo:

Mucha suerte y ánimo con los exámenes.

Anónimo dijo...

sí,es verdad, excepto los padres imaginarios.... gracias!

verónica

loli dijo...

Me ha encantado tu poema, y me ha emocionado. Gracias por compartir ese sentimiento y hacérnoslo sentir.

verónica dijo...

gracias a ti, besos!